POSTRES Y PANES

MAGDALENAS DE REMOLACHA

Es importante precalentar bien el horno, mantener una temperatura constante y sobre todo no abrir el horno antes de que hayan pasado 15 minutos o cuando la saquemos del horno estarán mal cocidas y se hundirán.

No hay que tener prisa en echar ingredientes y batir rápido. Se puede hacer la mezcla en quince minutos o menos, pero siempre con paciencia y viendo cómo está quedando al incorporar cada ingrediente.

INGREDIENTES

  • 220 g de harina de arroz
  • 65 g de harina de quinoa o de sorgo
  • 250 g de azúcar
  • 150 g de aceite
  • 300 g de remolacha cruda o cocida
  • 4 huevos
  • 8 g de levadura química y 8 g de bicarbonato
  • 15 ml de vino dulce Pedro Ximénez (opcional)

PREPARACIÓN

1. Antes de empezar a mezclar precalentamos el horno a 180 g. En un bol ponemos todo el aceite, el azúcar y uno a uno los huevos.

2. Añadimos las harinas ayudándonos de un colador para tamizarla y dejarla suelta. Previamente las habremos mezclado con los impulsores (levadura química y bicarbonato). Esto evitará que se nos hagan grumos y quede una masa lisa. Terminamos este paso añadiendo el Pedro Ximénez (opcional).

3. Apartamos un momento la mezcla principal y rallamos la remolacha. Es importante que el jugo que viene con la remolacha cocida se conserve si se quiere para el final.

4. Mezclamos la remolacha con la masa con movimientos envolventes para que se distribuya bien.

5. Echamos la mezcla en moldes de magdalena llenando hasta la mitad y un poco más, pero no nos pasemos o sino se desbordará.

6. Hornearemos a la temperatura que teníamos el horno con el programa de calor arriba y abajo. El tiempo depende del tipo de horno y el formato que uséis, pero con 25-30 minutos sería suficiente. Para comprobar si está cocido introducid el típico palillo que se ha usado siempre para esta función o una brocheta de metal y si sale sin masa pegajosa estará listo, sino lo dejáis un poco más de tiempo.

7. Una vez fuera del horno y frío, las bañamos en el jugo que hemos reservado (mirar en el apartado de consejos), se le puede poner un poco de glasa hecha con azúcar glas, zumo de limón y dos cucharadas de jugo de remolacha para darle ese color rosado. Rematar con unas flores de lavanda que perfumarán y le darán otro toque.

¡Comparte esta receta!

¿Quieres ser el primero en recibir nuevas recetas? ¡Apúntate a mi Newsletter!